lunes, 20 de agosto de 2012

"La sindicación web para optimizar la visita a páginas webs", en mi columna del diario Bahía de Cádiz

Esta semana en mi columna del diario Bahía de Cádiz hablo sobre la optimización de nuestro tiempo a la hora de ver las páginas webs que solemos visitar. A continuación el texto completo:

Todos los que utilizamos Internet tendemos a visitar siempre ciertas páginas para estar al día de los temas que nos interesa. La mayoría guardamos esas páginas en los marcadores de nuestro navegador de Internet para poder acceder a ellas con más comodidad en futuras visitas y, a la hora de visitarlas, muchos utilizamos algún método para revisarlas: abrir página por página hasta comprobarlas todas, iniciarlas al mismo tiempo con nuestro navegador para ir navegando entre pestaña y pestaña o utilizar la sindicación web (RSS) son algunos ejemplos.

Todos estos métodos, y otros tantos que existen, son igualmente válidos pero la mayoría sólo son eficaces y eficientes cuando se visita un número reducido de webs pues el proceso acarrea una pérdida de tiempo que, en el caso de que se visiten muchas páginas, puede llegar a ser bastante considerable. Es por esto que es interesante buscar una alternativa que nos permita realizar esta tarea de la mejor manera posible y evitar perder nuestro valioso tiempo.

miércoles, 8 de agosto de 2012

"El software libre no es sólo para la empresa", en mi columna del diario Bahía de Cádiz

Esta semana en mi columna del diario Bahía de Cádiz hablo nuevamente sobre el uso del software libre. Ya escribí una columna titulada "El software libre en la empresa" pero después de escribirla caí en la cuenta de que, al igual que una empresa, cualquier persona puede estar interesado en utilizar estos sistemas operativos y programas libres y gratuitos. Es por ello por lo que opté por escribir un segundo escrito relacionado estrechamente con el primero pero dirigido a todos aquellos que deseen introducirse en el mundo del software libre. A continuación el texto completo:

Hace unas semanas escribí, en este mismo diario, una columna sobre el software libre en la empresa y sus beneficios para ésta. Hoy, como el propio título indica, voy a hablar sobre el uso de ese mismo software a nivel doméstico. Antes de continuar recomiendo que se lea mi anterior escrito sobre “El software libre en la empresa” pues ayudará a la mejor comprensión de esta columna.

Antes de la crisis era más común que en caso de que un equipo “casero” comenzara a dar problemas relativamente graves se prefiriera adquirir uno nuevo a reciclarlo. Hoy en día ocurre exactamente lo contrario y se prefiere, o más bien se intenta, alargar la vida del ordenador lo máximo posible para no incurrir en un gasto. Ahora bien, alargar la vida de un equipo informático tiene algún que otro inconveniente. Ya comenté (en la columna relacionada con ésta) que los sistemas operativos y programas cada vez necesitan más recursos para trabajar en buenas condiciones. Esto provoca que un equipo poco potente o algo anticuado, aún estando el sistema operativo recién instalado, no rinda como debiera y provoque que la experiencia del usuario no sea la más óptima. En estos casos hay dos posibles soluciones: instalar un sistema operativo privativo antiguo pero optimizado para el equipo con el inconveniente de que el ordenador queda desprotegido por falta de actualizaciones y la posible incompatibilidad de algunos programas nuevos; o, la segunda opción, instalar un sistema operativo libre preparado para trabajar en equipos ya no tan nuevos y/o con pocos recursos pero que permite tener el PC actualizado y protegido.